Para Alejandro Farías Cofré fue fácil decidirse a la hora de ingresar a estudiar la carrera de psicología, por su facilidad para asesorar a otros en diferentes contextos, escuchar de manera activa y empatizar. A lo cual se sumó que siempre le gustó el área.
Con el tiempo ha desarrollado su campo laboral en el área de educación, contribuyendo al territorio desde la provincia de Malleco, primero en la comuna cordillerana de Lonquimay, luego en escuelas rurales y en la actualidad en el Complejo Educacional Collipulli como Coordinador del Departamento de Asuntos estudiantiles.
Tras su egreso de la carrera en el año 2010, ha realizado diversos perfeccionamientos en las áreas de convivencia escolar, neurociencias y liderazgo educativo, entre otras. Por ello, nos indica que cree que es esencial que los nuevos estudiantes se actualicen más allá del plan de estudios y aprovechen todas las instancias para adquirir nuevos conocimientos, en talleres, seminarios y busquen nuevos espacios de aprendizaje.
Recuerda que de los tiempos de estudiante, hubo profesores que lo marcaron por su forma de explicar “como olvidar a mis profesoras Ximena Suárez, Carmen Gloria Muñoz, Angélica Parada o al profesor Nelson Castro, por cuanto, en sus distintos ramos, hicieron que la sicología fuese más fácil de entender y lograron entregarnos no solo contenidos sino, competencias para ejercer en el futuro”.
Por otro lado,considera que el profesional de la UNAP, egresa preparado con más competencias que vienen en el plan de estudio de cada carrera, es decir integral, especialmente en el contexto de habilidades blandas, así como en competencias claves como la proactividad, autonomía y adaptabilidad. Creo que además a nivel práctico los estudiantes salen bien preparados para enfrentar el desafío del mundo laboral, considerando la cantidad de prácticas y pre prácticas.
Eugenia Guzmán
